Agosto ha agotado sus días de playa, sol y ocio y toca volver al trabajo. Reincorporarnos a nuestra rutina laboral puede ser duro y es normal que necesitemos un período de adaptación para decir adiós al verano.
Cansancio, estrés y desánimo pueden surgir, sobre todo, los primeros días de vuelta a la rutina. Sin embargo, para que estos síntomas vayan poco a poco disminuyendo te vamos a ofrecer en este post algunos consejos para que esa reincorporación sea un poco más llevadera.
Actitud positiva, la clave para volver a la rutina feliz
La forma en la que afrontemos esa vuelta a nuestros quehaceres diarios es primordial. Una actitud positiva siempre va a ayudar a que nos adaptemos con mayor rapidez y facilidad a nuestro ritmo laboral.
Deja atrás pensamientos y la melancolía de un verano en la playa sin más preocupaciones y céntrate en los nuevos retos que están por venir. Si te dejas llevar por una actitud pesimista el camino se te hará muy cuesta arriba.
Planificación de tareas
Sé muy estricto en tus tareas, eso te ayudará a coger el ritmo con más facilidad. Calendariza qué es lo que tienes qué hacer y marcarte unos horarios para hacerlo. También puedes establecer objetivos semanales que te ayudarán a ser poco a poco más productivo.
Adapta el ritmo de trabajo
Seamos realistas y conscientes. Es normal que tras varias semanas de vacaciones tu ritmo de trabajo haya bajado o disminuido. Por tanto, sé consciente de tus limitaciones el primer día y adapta el trabajo en función de tus fuerzas.
Organiza planes tras la jornada
Intenta aprovechar esos últimos días para hacer una escapada corta, ver a los amigos que no has visto durante todo el verano… Esto te ayudará a reducir un poco el estrés de los primeros días.
Más tiempo para tus aficiones
Estos primeros días de vuelta, es bueno cuidarnos un poco más de lo habitual. Podemos dedicar o buscar hueco para nuestras aficiones. Salir a pasear, leer un libro, desayunar tranquilamente… ¡Busca la tuya y haz ese «break»!
Aumenta tus horas de sueño
Levantarse más cansado de lo que te has acostado, puede darse con frecuencia en esa vuelta al trabajo. Por tanto, ¿qué necesitas? Dormir, quizás un poco más de lo habitual. Así que intenta controlar tus horas de sueño, siempre vienen bien para afrontar el nuevo curso.
Estos consejos también se pueden adaptar a aquellas personas que están desempleadas que buscan una oportunidad laboral con la que desarrollar su carrera profesional. Para ellos, agosto también ha sido un mes de desconexión y toca volver a aplicar a ofertas laborales y las entrevistas de trabajo. Poco a poco, sin estrés.
Y si este verano, en tu mente ha estado más presente que nunca que no quieres volver a tu trabajo o que quizás no estés haciendo bien tu búsqueda de empleo. No lo dejes de lado y busca aquello que te apasione. Existen cientos de perfiles profesionales que te pueden garantizar tu futuro laboral. Y la formación es la apuesta segura para conseguirlo.
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